miércoles, 29 de febrero de 2012

Por favor, no molestar. Personas buscando trabajo.




El pasado noviembre se organizaron unas jornadas monográficas de empleo en Andalucía, en diversas ciudades y con diversos ponentes. Entre ellos estaba el ínclito (ínclito: Ilustre, esclarecido, afamado, DRAE.) Risto Mejide, publicista, comentarista, polemista y algún "ista" más, y empresario, supongo que con cierto éxito. En la web del evento colgaron algunos videos de los ponentes, de un minuto y medio o dos (como debe ser), en la que resumen sus ponencias de forma breve, y que he conocido a través del estupendo blog de Guillem Recolons.

Hace ya unas horas que me he propuesto escribir sobre ésto, y he dejado pasar unas horas a ver si se me pasaba. El sonrojo y la vergüenza. Que de las dos me han entrado al ver el tipo de actos y el vídeo del susodicho (Eva)Risto Mejide.



Sonrojo por ver semejante despliegue de fastos: 8 ciudades, supongo que con buenos salones de actos y demás. En la relación de ponentes, hay algunos que son buenos, o por lo menos tienen buena reputación, otros son conocidos profesionales, pero de otras lides (periodistas), y algún profesional de la empresa y de los recursos humanos. Y luego, está Risto. Sí, el de Operación Triunfo, el de Tú si que vales, el de G20.  Que no sé cómo calificarlo ni clasificarlo.

Si veis el vídeo, veréis que empieza diciendo que intenta trasladar estrategias de márketing a la persona, es decir, las técnicas con las que se ha buscado la creación de marca ("branding", le dicen los hijos de Albión), aplicarlas para crear marca personal (ya imagináis cómo lo llaman a eso los hijos de Albión, "personal branding"). Hay mucha información, y muy interesante, sobre ésto en Internet.

Reconozco que es un concepto atractivo, que engancha y que está siendo profusamente difundido y estudiado. Conseguir posicionar a cada persona como una marca, es decir, con sus propios valores y la capacidad para diferenciarse del resto, es algo que por fuerza debe reportar beneficios, así como las consabidas dosis de autoestima y automotivación. Sin embargo, en mi opinión es un concepto muy válido para profesionales que quieren desarrollar su carrera profesional con el apoyo de las nuevas tecnologías, por ejemplo, ya que el concepto de marca, reputación, etc... es un elemento de valoración importante en este tipo de actividad. También para aquellas personas que van a dar o estén dando un salto como emprendedores al trabajo por cuenta propia, ya que a medio o largo plazo la marca personal es mucho más rentable que la publicidad, y desde luego es una barrera competitiva muy eficaz.

Ahora bien, ¿qué puede aportar el Sr. Mejide en este campo?. De momento, famoso es. Que ha creado una "imagen de marca", también. Pero, si pedimos a 100 personas que nos definan a este tío con la primera palabra que les venga a la mente, apuesto a que el 75% dice "tocapelotas", o algo de más grueso calibre. "Jeta" o "maleducado", también es posible que abunde en las respuestas.

Nos descubre su método, el que supongo que le ha hecho pasar de desconocido publicista a famoso imprescindible en cualquier programa que quiera levantar algo de polvareda. Él, parece ser, ha cimentado su carrera en 5 puntos:
- Ha descubierto su "rareza", que recomienda que todos hagamos (hagáis).
- Averiguar a quién molesta tu rareza (sí, a quién le molestas más).
- Conseguir que esa molestia sea algo inevitable.
- Conseguir que esa molestia sea algo imprescindible.
- Conseguir que esa molestia sea algo impredecible.

Buuuf, qué perlas, Dios mío. Está claro que él ha detectado su "rareza" (posiblemente, su forma directa de hablar y juzgar las cosas, que unos llaman "sinceridad descarnada" y otros "falta manifiesta de empatía y educación"), ha comprobado quienes lo sufren más (en general, concursantes inexpertos y    presionados), se ha hecho imprescindible (porque levanta polémica y por tanto, ya tenemos al malo de la película). Con lo de imprescindible no estoy muy de acuerdo, precisamente porque creo seriamente que interpreta un personaje, por lo que ya sabemos todos por dónde van los tiros cuando aparece este hombre.

Que a él le haya valido, no presupone que a los demás les pueda funcionar. Esa es su experiencia, y de éstos personajes, afortunadamente, no hay tantos en el panorama. Seguramente le estará sacando buenos réditos al asunto, en lo profesional y en lo personal. Y ahí está, dando conferencias para ayudar al empleo.

Que es lo que me indigna. Este método para encontrar empleo, no me cuadra mucho. Tú dile a un joven, buscando activamente empleo, intentando  tener un CV atractivo, asistiendo a cursos, charlas, talleres de todo tipo, que lo que mola es molestar. Tú molesta, molesta mucho, a mucha gente, constantemente, y te irá de cine. Como a mí. O dile a un profesional hecho y derecho, que después de 25 años en una empresa lo han puesto en la calle por la maldita crisis, que a partir de ahora piense dónde molesta más, y se dedique con todas sus fuerzas a eso. Que así pagará la hipoteca y dará de comer a sus hijos, molestando todo lo que pueda.

Por cierto, para buscar empleo, ¿a quién hay que molestar? ¿a los empresarios que entrevistan candidatos para contratar en su empresa? ¿a los consultores de selección que intentamos desarrollar procesos con garantías para ambas partes? ¿a los técnicos de orientación y empleo de los sistemas públicos? ¿Cuánto le habrá pagado la Junta de Andalucía para transmitir un sistema tan preclaro?

Alguien tendría que haberle hecho un favor a este señor y haberle hecho un pequeño paralelismo: "Mira, Risto, lo que te ha ido bien a ti, se puede aplicar a la búsqueda de empleo, pero de otra forma. Mira, así":

  • Identifica tu fortaleza profesional. Se trata de pensar: "¿En qué soy realmente bueno?". Siempre desde el punto de vista profesional. "Sé que soy un muy buen comercial", "Se me da estupendamente bien el análisis de tareas", etc...
"Todos tenemos un talento, lo difícil es encontrarlo". Billy Elliot. 
  •  Averigua a quién le hace falta ese talento (empresas de ventas, de mantenimiento, de producción, consultores de organización....)
  • Manda tu candidatura a estas empresas. Averigua cosas del sector, problemas que tienen, dificultades, tecnologías emergentes, amenazas, etc.. Si es necesario, fórmate en ello (cursos sectoriales, por ejemplo, la mayoría gratuitos). Actualiza tu CV a menudo, poniendo el énfasis en "esa" habilidad o competencia que tienes. 
  • Intenta entrevistarte con alguna empresa del sector o con algún consultor que lleve procesos de ese tipo. Demuéstrales que sabes de qué hablas, y que eres un auténtico "crack" en eso.
  • Y por último, sé tenaz. Insiste. No te rindas a la primera. Si realmente tienes talento, tarde o temprano tendrás la oportunidad que te mereces. Ya sabes que el difícil encontrarlo, y aún más poder demostrarlo.


Bueno, ya se me ha pasado un poco el cabreo con este asunto.

Que seáis buenos y tengáis mucha suerte. Os espero pronto.


No hay comentarios:

Publicar un comentario